Con motivo de la celebración del Día Mundial de la Poesía, lunes 21 de marzo, reproducimos este texto tan bonito del poeta oriolano Miguel
Hernández, cuyo 80 aniversario de su fallecimiento estamos celebrando este año,
que es un extracto de la carta dirigida al poeta onubense Juan Ramón Jiménez, a
quien tanto admiraba.
Aprovechamos para animaros a visitar el Museo Miguel
Hernández-Josefina Manresa de Quesada, con la convicción de que lo disfrutaréis
y os despertará las ganas por leer la poesía del poeta universal, símbolo de las
letras españolas del siglo XX, cuya esposa, musa y protectora de su legado,
Josefina Manresa, nació en Quesada en 1916. Ambos fueron nombrados hijo adoptivo e hija predilecta, respectivamente
por el Ayuntamiento del municipio.
Carta, 1931, noviembre, Orihuela (Alicante), de Miguel Hernández Gilabert a Juan Ramón Jiménez.
D. Juan R. Jiménez
Venerado Poeta: Solo conozco a Vd. por su "Segunda Antología Poética" que -créalo- ya he leído cincuenta veces, aprendiéndome algunas de sus composiciones. ¿Sabe usted dónde he leído tantas veces su libro?. Dónde son mejores todos: en la soledad, a plena naturaleza, y en silenciosa, misteriosa, llorosa hora del crepúsculo, yendo por antiguos senderos empolvados y desiertos entre sollozos de esquilas...
No le extrañe lo que le digo admirado maestro: es que soy pastor. No mucho poético, como lo que Vd. canta, pero si un poquitín poeta. Soy pastor de cabras desde mi niñez. Y estoy contento con serlo, porque habiendo nacido en casa pobre, pudo mi padre darme otro oficio y me dió este que fué de dioses paganos y héroes bíblicos.
Como le he dicho, creo ser un poco poeta. En los prados por que yerro con el cabrío ostenta natura su mayor grado de belleza y pompa: muchas flores, muchos ruiseñores y verdores, mucho cielo y mucho azul, algunas majestuosas montañas tras las cuales rueda la gran era del Mediterráneo.
...Por fuerza he tenido que cantar... Inculto, tosco, se que escribiendo poesía profano al divino Arte... No tengo culpa de llevar en mi alma una chispa de la hoguera que arde en la suya...
Vd. tan refinado, tan exquisito cuando lea esto ¿qué pensará? Mire: odio la pobreza en la que he nacido, yo no sé... por muchas cosas... Particularmente por ser causa del estado inculto en que me hallo que no deja expresarme bien ni claro ni decir las muchas cosas que pienso. Si son molestas mis confesiones, perdóneme, y... -Ya no sé como empezar de nuevo-. Le decía antes que escribo poesía... Tengo un millar de versos compuestos sin publicar. Algunos diarios de la provincia comenzaron a sacar en sus páginas mis primeros con elogios... Dejé de publicar en ellos... En provincia leen bien pocos los versos y los que los leen no los entienden. Y heme aquí con un millar de versos que no sé qué hacer con ellos. A veces me he dicho que quemarlos tal vez fuera lo mejor.
...Soñador como tantos, pienso ir a Madrid. Abandonaré las cabras
-ah, sus esquilas en la tarde!- y con el escaso cobre que puedan darme mis padres tomaré el tren de aquí a una quincena de días para la corte.
¿Podrá Vd. dulcísimo don Juan Ramón recibirme en su casa y leer lo que le lleve?... ¿Podrá enviarme unas letras diciéndome lo que cree bien?
Hágalo por este pastor un poquito poeta que se lo agradecerá eternamente.
Dirección:
Miguel Hernández
Arriba, 73
Orihuela.
DIGITALIZADA POR EL INSTIUTO DE ESTUDIOS GIENNENSES DE LA DIPUTACIÓN PROVINCIAL DE JAÉN:
https://www.dipujaen.es/miguelhernandez/catalogo/viewer.vm?id=0000353978&page=1&search=&lang=es&view=mh
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